Esta aparición fue contada por Conchita en una carta al Rev. P. Morelos y dice textualmente:
"El sábado, día 13 (de Noviembre), tenía anunciado por la Virgen, en una locución (que la recibió) en la Iglesia, que la vería a Ella en los Pinos: especial aparición para besar objetos religiosos para yo repartirlos, ya que los cuales tienen una grande importancia. Yo con muy grandes deseos de que llegara ese día, para volver a ver a quienes han traído a mi alma la felicidad de Dios. La Virgen y el Niño Jesús, que le traía en sus brazos.
Estaba lloviendo, pero claro a mí no me importó subir a Los Pinos y llevaba muchos rosarios, que hacía poco me los habían regalado, para repartirlos, yo, como me había dicho la Virgen (en la locución), los llevé para que los besara.
Subiendo a los Pinos que subí sola iba diciéndome, como muy arrepentida de mis defectos, que ya no caería más en éllos, porque me dará apuro presentarme delante de la Madre de Dios, sin quitarlos. Cuando llegué a Los Pinos me puse a sacar los objetos religiosos que llevaba, y en ese momento, oí una voz muy
dulce, que me llamaba por mi nombre, yo le he contestado: "qué!" Y la he visto, con el Niño Jesús en brazos, venía como siempre vestida y sonriente. Le he dicho:
—"Ya he venido a traerte los rosarios para que los beses", Ella me ha dicho:
—"YA LO VEO".
Yo traía chicle, pero cuando la veía a Ella no lo masticaba, lo he puesto en una muela. Pero Ella se conoce, que ha conocido lo que lo traía, y me ha dicho:
—"CONCHITA, ¿PARA QUE NO DEJAS TU CHICLE Y LO OFRECES COMO UN SACRIFICIO POR LA GLORIA DE MI HIJO".
Yo con vergüenza, lo he sacado y lo he tirado al suelo. Después me ha dicho:
—"TE ACORDARAS DE LO QUE TE HE DIcho EL DIA DE TU SANTO, DE QUE SUFRIRIAS MUCHO EN LA TIERRA, TEN CONFIANZA EN NOSOTROS LO LLEVARÁS (OFRECERÁS) CON GUSTO A NUESTROS CORAZONES, POR EL BIEN DE TUS HERMANOS, Y ASI NOS SENTIRÁS MAS CERCA DE TI".
Yo le he dicho qué indigna soy, oh Madre Nuestra, de tantas Gracias recibidas por Vos, y todavía venir hoy a mí, para sobrellevar mi pequeña cruz que ahora tengo", Ella me ha dicho:
—"CONCHITA, NO VENGO SOLO POR TI, VENGO PARA TODOS MIS HIJOS, CON LOS DESEOS DE ACERCARLOS A NUESTROS CORAZONES".
Me ha dicho:
—"DAME, PARA YO BESAR TODO LO QUE TRAES".
Y se lo he dado, llevaba una Cruz conmigo y la ha besado, y me ha dicho:
—"PASALA POR LAS MANOS DEL NIÑO JESÚS". Así lo he hecho. El no me ha dicho nada, yo he dicho a la Virgen:
—"Esta Cruz la llevaré conmigo al convento", Ella no me ha dicho nada. Después de besarlo todo me ha dicho:
—"MI HIJO POR MEDIO DEL BESO QUE YO HE DADO EN ELLOS, HARÁ PRODIGIOS. REPÁRTELOS A LOS DEMÁS". Así lo pienso hacer. Me ha pedido le diga las peticiones para los demás, que me habían mandado hacerle, yo se las he hecho y me ha dicho:
—"DIME CONCHITA, DIME COSAS DE MIS HIJOS, A TODOS LOS TENGO BAJO MI MANTO", yo le dicho, —ES MUY PEQUEÑO, NO CABEMOS TODOS.
Ella ha sonreído.
—"SABES, CONCHITA, PORQUE NO HE VENIDO YO EL 18 DE JUNIO A DECIRTE EL MENSAJE, PARA EL MUNDO, PORQUE ME DABA PENA DECIROSLO YO, PERO OS LO TENGO QUE DECIR, PARA BIEN VUESTRO, Y SI LE CUMPLÍS PARA GLORIA DE DIOS. OS QUIERO MUCHO Y DESEO VUESTRA SALVACIÓN Y REUNIROS AQUÍ EN EL CIELO EN TORNO DEL PADRE, HIJO Y ESPÍRITU SANTO. ¿VERDAD TU CONCHITA NOS RESPONDEREIS?", yo le he dicho:
"Si estaría siempre viéndote, sí, pero si no, no sé, porque soy muy mala,
—"TU PON DE TU PARTE TODO Y NOSOTROS TE AYUDAREMOS", ha estado muy poco. Me ha dicho:
—"SERÁ LA ÚLTIMA VEZ QUE ME VEAS AQUÍ, PERO ESTARÉ SIEMPRE
CONTIGO Y CON TODOS MIS HIJOS".
También me ha dicho:
—"CONCHITA, ¿POR QUE NO VAS MAS A MENUDO A VISITAR AL SAGRARIO A MI HIJO QUE OS ESTÁ ESPERANDO DE DÍA Y DE NOCHE".
Como ya he dicho antes estaba lloviendo mucho, y la Virgen y el Niño Jesús no se mojaban nada, yo cuando los estaba viendo a ellos no me daba cuenta que llovía, pero después estaría mojada. Le he dicho a a la Virgen:
—"Qué feliz soy cuando os veo, ¿por qué no me llevas ahora contigo al cielo", me ha dicho:
—"SOLAMENTE DE LO QUE TE DIJE EL DÍA DE TU SANTO, Y AL PRESENTARTE DELANTE DE DIOS TIENES QUE MOSTRARLE TUS MANOS LLENAS DE OBRAS HECHAS POR TÍ EN FAVOR DE TUS HERMANOS Y PARA GLORIA DE DIOS, Y AHORA LAS TIENES VACÍAS".Y nada más Se ha pasado el feliz rato que estuve con mi Madre del Cielo y mi mejor Amiga , y con el Niño Jesús, los he dejado de ver pero no de sentirlos. De nuevo han dejado en mi alma una paz, una alegría y unos grandes deseos de vencer mis defectos, y de amarlos, con todas mis fuerzas, a los Corazones de Jesús y de María, que tanto nos quieren...
Anteriormente la Virgen me había dicho que Jesús no nos manda el castigo para fastidiarnos, sino para ayudarnos, y para comprendamos de que no le caso. El
aviso nos lo manda, para purificarnos, para ver el milagro, en el cual nos demuestra claramente el amor que nos tienen y por eso el deseo que tienen de que cumplamos el mensaje.
El "aviso" se verá, y pasará, en todas partes y cada persona, es como un castigo, se verá lo que hemos hecho nosotros con nuestros pecados. Yo pienso que nos vendría muy bien, para los que no se desesperen, para nuestra santificación".
(Firmado): Conchita González, hoy 10-XII-1965
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